108 minutos

VOLVER
Yuri y Tierra

¿Qué se puede hacer en 108 minutos?

108 minutos: casi 6500 segundos, poco menos de dos horas.

108 minutos que bastaron para que el cosmonauta soviético Yuri Gagarin se convirtiera en leyenda el 12 de abril de 1961.

108 minutos le llevó completar una órbita alrededor de la Tierra, 300 kilómetros sobre la superficie, a 28 mil kilómetros por hora

108 minutos; 2 592 respiraciones y 6912 latidos de su corazón entrenado para la hazaña.

108 minutos pasaron desde que la pequeña esfera de la Vostok I despegó del cosmódromo de Baikonur hasta que el cosmonauta y su asiento fueron eyectados para descender en paracaídas nuevamente a la Tierra.

108 minutos desde que partió hacia el espacio con un alegre ¡poyéjali! (¡vamos!) hasta que puso sus pies nuevamente en el suelo cerca de un pueblito campesino a las orillas del Volga.

Dicen que durante esos 108 minutos Yuri comió; bebió y se maravilló al ver cómo las gotitas de agua quedaban suspendidas a su alrededor. La sensación de ingravidez le resultaba interesante y placentera.

 

Yuri Gagarin

 

Dicen que se tomó su tiempo para escribir sus impresiones en una libretita que dejaba flotar libremente dentro de la cápsula.

Por la transcripción de las comunicaciones con el centro de control de vuelo sabemos que antes de despegar escuchó música:  Corazón, de Leonid Utesov (Click)

En una carta contó que en su cabeza y en su corazón llevaba las canciones de Lolita Torres, que había escuchado hasta aprenderlas de memoria durante su entrenamiento.

En su autobiografía escribió que mientras descendía vertiginosamente en la reentrada atmosférica cantó una canción patriótica mientras el exterior de la nave alcanzaba temperaturas altísimas por la fricción.

El primer ser humano que pudo observar la Tierra desde el espacio no pudo menos que maravillarse por su belleza.  El cielo negro, las estrellas muy brillantes, las nubes y sus sombras.  Todo le parecía hermoso. El horizonte, su curvatura rodeada por un halo azul claro que se oscurece gradualmente separando la colorida Tierra del cielo profundamente negro.

A su regreso dejó un mensaje que, con el paso de los años, adquiere cada vez más vigencia: "Dando vueltas a la Tierra en mi nave espacial orbital me maravillé de la belleza de nuestro planeta. Pueblos del mundo, protejamos y aumentemos esa belleza, no la destruyamos".

 

primera foto

Primera fotografía capturada por un astronauta, Gherman Titov, piloto de combate soviético y cosmonauta, quien sólo unos meses después de la proeza de Gagarin, un 6 de agosto de 1961, viajó al espacio como piloto de la Vostok2. Equipado con una cámara Konvas Avtomat y varios carretes de 300 milímetros, captó imágenes de nuestro planeta desde la estratosfera, a unos 300 kilómetros de altitud. Esta fue su primera fotografía